Los lácteos en sí aportan vitaminas y minerales, pero el yogurt griego cuenta con más proteínas que otros de tipo convencional.Por ración, puedes obtener entre 9 y 12 gramos de proteína.
Un desayuno hiperproteico contribuye a controlar el apetito y evitar el picoteo entre comidas principales, facilitando la conexión entre nuestro intestino y cerebro; de esta forma, se transmite la información con más facilidad y se disminuye la secreción de la hormona que controla el hambre (leptina), producida durante la digestión.